Surcos nasogenianos y falta de piezas dentales

La estética facial guarda bastante relación con nuestra salud bucal. Y no hablamos solo de una sonrisa alineada y bonita, sino también de la aparición de huellas sobre nuestra piel. Huellas como los surcos nasogenianos. Desde Clínica Dental Fray Luis de León te explicamos qué son y cómo prevenirlos. 

El envejecimiento de la piel hace que ésta pierda firmeza y elasticidad, dando paso a arrugas o marcas en nuestro rostro. Entre ellas, los surcos nasogenianos que aparecen como pequeñas líneas entre nuestros labios y nariz. Seguro que se las has visto a personas de tu entorno o que, incluso, tú misma las tengas ya que pueden empezar a aparecer de forma sutil desde los 30 años, aproximadamente. 

Pero además del envejecimiento habitual, hay factores que pueden acelerar su aparición como la exposición prolongada a los rayos solares (sin protección solar) o los malos hábitos, en especial el hábito de fumar, ya que el tabaco reduce el flujo sanguíneo y afecta negativamente a la elasticidad de la piel. 

Otra causa de la aparición de estos surcos es la pérdida de piezas dentales. La ausencia de dientes, no solo afecta a la estética de nuestra sonrisa, sino que también puede deformar la expresión facial o, como consecuencia de una mayor flacidez de la piel, provocar la aparición de arrugas y/o surcos en la parte externa de la boca. Es decir, perder dientes está relacionado directamente con un envejecimiento prematuro. 

¿Puedo prevenirlos?

Empecemos por lo último. Si existe pérdida de piezas dentales (lo cuál provoca el hundimiento de la piel), la mayoría de odontólogos te recomendarán invertir en la colocación de implantes dentales. Un tratamiento que no solo mejorará tu rostro desde el punto de vista estético (piel y sonrisa), sino que también será beneficioso para tu mordida y la correcta masticación de los alimentos. 

En casos donde no existe esta relación entre falta de dientes y aparición de surcos, lo aconsejable es prevenir mediante una correcta limpieza diaria del rostro (eliminando restos de maquillaje) y una correcta hidratación con cremas ricas en colágeno. Beber mucha agua y no fumar también es vital. 

Y, por supuesto, insistir en una correcta higiene bucodental mediante el cepillado y enjuague diario. Solo así tendremos una boca sana y evitaremos perder alguna pieza o dañar algún diente mediante la afectación al esmalte. 

¡Recuerda! En Clínica Dental Fray Luis de León estamos atentas a cualquier duda o asesoramiento que necesites. Nuestras puertas están siempre abiertas para ti. 

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